Es la situación que de forma provisional se produce con los bienes y derechos de una persona desde su fallecimiento hasta que su herencia es aceptada (o rechazada) por todos y cada uno de sus herederos.
Lo más importante es que ese conjunto patrimonial debe ser administrado desde el principio hasta que se produzca la aceptación de la herencia, ya que existen obligaciones durante ese periodo que son necesarias cumplir como por ejemplo pagar el impuesto de sucesiones en los 6 meses después del fallecimiento.
Los actos de administración o conservación del patrimonio realizados por alguno de los herederos, no pueden considerarse como aceptación de la herencia.
La herencia yacente puede ocasionar perjuicios a los herederos que no agilicen el proceso legal, ya que puede esta situación puede prolongarse hasta un límite de 30 años.
Leave A Comment